El liquen plano oral (LPO) es una patología crónica e inflamatoria que se manifiesta en la mucosa bucal y afecta a un 1–2% de la población. Se considera que está mediada por una alternación de la respuesta inmunitaria en la que participan los linfocitos T helper y, aunque se desconocen sus causas concretas, se relaciona con el estrés mental, la malnutrición, las infecciones virales o el tabaquismo.
Algunos autores han descrito que determinados biomarcadores están presentes tanto en las enfermedades periodontales como en el LPO y juegan un papel importante en la patogénesis de ambas enfermedades. No obstante, en la literatura científica aún no se ha alcanzado consenso respecto a la posible relación entre ambas enfermedades. Por esta razón, el objetivo de esta revisión sistemática con metaanálisis fue analizar si el LPO se asociaba con la enfermedad periodontal y si podía constituir un factor de riesgo para el empeoramiento de esta.
Los estudios seleccionados para la revisión debían incluir pacientes con enfermedad periodontal (gingivitis o periodontitis) mayores de 20 años y comparar los individuos con LPO frente a los que no presentaban LPO (controles). Tras la búsqueda bibliográfica y la eliminación de los estudios duplicados y los que no cumplían los criterios de inclusión, se seleccionaron seis estudios. Estos incluían los datos de 244 pacientes con enfermedad periodontal, de los cuales, 116 presentaban LPO. De los seis estudios, tres analizaban solamente pacientes con periodontitis; uno, solamente pacientes con gingivitis, y dos, pacientes con cualquiera de estas dos enfermedades periodontales.
Todos los estudios incluidos describían un empeoramiento del estatus clínico periodontal en presencia de LPO. A este respecto, los metaanálisis en pacientes con gingivitis mostraron un aumento del índice gingival, índice de placa y profundidad al sondaje en individuos con LPO frente a los controles. De forma similar, la presencia de LPO en pacientes con periodontitis también se asoció a un incremento de estos parámetros, junto con un aumento de la pérdida de inserción clínica.
Por otra parte, los seis estudios de la revisión evaluaban la presencia de biomarcadores de enfermedad periodontal; concretamente, los niveles de determinadas de la matriz extracelular —enzimas relacionadas con la preservación/degradación del tejido periodontal conectivo— y Aunque no se pudo realizar metaanálisis por falta de datos, el análisis cualitativo mostró mayores niveles de estos biomarcadores en aquellos individuos con LPO. Concretamente, tres estudios describían un aumento en las concentracions de las interleucinas IL-23 e IL-35 en pacientes con periodontitis y LPO frente a los ocontroles (dos estudios analizaban los niveles de IL-17 e IL-23 y uno, los de IL-35). Del mismo modo, un estudio mostraba mayores concentraciones de las metaloproteinasas MMP-1 y MMP-9 en pacientes con gingivitis o periodontitis y LPO frente a los respectivos controles. Finalmente, dos estudios analizaban la cantidad de patógenos periodontales (uno, en pacientes con gingivitis y el otro, tanto en pacientes con gingivitis como en pacientes con periodontitis) y reportaban un aumento en los grupos de pacientes con LPO respecto a los controles.
En definitiva, este estudio se trata de la primera revisión sistemática con metaanálisis que investiga la asociación entre el LPO y el empeoramiento de las enfermedades periodontales, y sus resultados sugieren que existe una asociación significativa entre la gravedad de la enfermedad periodontal y la presencia de LPO. No obstante, para dilucidar la relación de causalidad entre el LPO y la progresión y empeoramiento de las enfermedades periodontales es necesario disponer de estudios prospectivos y trabajos que analicen las variables potencialmente confusoras.
Nunes GP, Pirovani BO, Nunes LP, Silva ANA, Morábito MJSD, Nunes-Júnior NA, Delbem ACB, Ferrisse TM
Clin Oral Investig. 2022;26:3357-3371.