La microbiota de la cavidad oral está compuesta principalmente por bacterias y, en menor proporción, por virus, hongos y protozoos1. La mayoría de estos microorganismos son comensales, pero pueden convertirse en patógenos frente a determinados estímulos1,2.
Algunos de los microorganismos que se han relacionado con la enfermedad periodontal son: Porphyromonas gingivalis, Tannerella forsythia, Treponema denticola, Prevotella intermedia y Fusobacterium nucleatum1, en el caso de las bacterias; algunos virus de las familias herpesvirus y citomegalovirus3; y hongos del género Candida4. Respecto a los protozoos, se ha descrito que Entamoeba gingivalis y Trichomonas tenax pueden estar involucrados en las enfermedades periodontales5,6. T. tenax es un parásito humano que suele encontrarse en la cavidad oral y ha sido detectado en el biofilm subgingival7. Sin embargo, ocasionalmente también se ha aislado de las glándulas salivales, ganglios linfáticos o infecciones del tracto respiratorio8–10.
En 2019, Benabdelkader et al. analizaron la prevalencia de T. tenax en la periodontitis y la relación de este microorganismo con la gravedad de la periodontitis. Para conocer la prevalencia de T. tenax, tomaron muestras de 106 pacientes con periodontitis y 85 controles sanos e identificaron a T. tenax mediante dos métodos: cultivo del microorganismo y PCR cuantitativa. Al combinar los resultados obtenidos mediante estas dos técnicas, observaron una mayor prevalencia de T. tenax en los pacientes con periodontitis (42.5%) que en los controles (28.2%). Asimismo, los autores describieron una mayor frecuencia de T. tenax en los individuos con periodontitis grave que en los que presentaban periodontitis leve o moderada11.
En el mismo año, Bisson et al. llevaron a cabo una revisión sistemática para analizar la presencia de T. tenax en pacientes con periodontitis, el impacto del tratamiento periodontal no quirúrgico en la presencia de este microorganismo y los factores de virulencia de T. tenax que podrían contribuir al desarrollo de la periodontitis. Los resultados principales de la revisión, que incluía 25 artículos, se pueden resumir en los siguientes puntos12:
En resumen, estos estudios indican que T. tenax es más frecuente en pacientes con periodontitis, se relaciona con formas de periodontitis más graves y tiene capacidad para degradar el tejido periodontal. Para mantener una buena higiene bucodental y una cavidad oral libre de microorganismos potencialmente patógenos como T. tenax, es necesario seguir unas buenas prácticas de higiene bucal, como el cepillado dental, la limpieza interproximal y el uso de colutorios antimicrobianos13. En este sentido, se ha descrito que los colutorios con clorhexidina son eficaces para la eliminación de protozoos de la cavidad bucal como T. tenax o E. gingivalis14. Cabe recordar que los enjuagues con la combinación de clorhexidina-cloruro de cetilpiridinio tienen una actividad antibacteriana superior a los que contienen solamente clorhexidina15,16, por lo que podrían contribuir en mayor medida a la eliminación de los microorganismos periodontopatógenos de la cavidad oral.